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La vida después de tanto tiempo comenzaba a sonreirme, me estaba integrando bien en el grupo, todos eran simpáticos conmigo.
El tiempo comienzo a transcurrir y las fiestas se acercaban. Un día se me acerco Lierni, mi mejor amiga se podría decir:
- Bueno Sara, ya que queda poco para las fiestas un día de estos vamos a quedar para organizarlo todo, ya sabes hay que comprar para los litros y así.
-A, bale.
-Tu te apuntas ¿no?
-No se, es que yo como no salia pues hasta ahora no bebo.
-¡Da igual! Siempre hay una primera vez para todo pues a ti ya te ha llegado la hora.
-Si tu lo dices...- dije con poco combenzimiento.
Lo de beber no es que lo vea muy claro y no creo que estos se queden solo en beber, pero no les puedo decir que no, ahora que he empezado a integrarme... No me voy a morir por unos litros o eso espero.

-Bueno ahora que estamos todos ¿por que no organizamos lo de las fiestas?-dijo Unai.
-No es mala idea-le responde Lierni
-Bueno empezamos por los litros, lo primero ¿a quien le pedimos que nos los compre?
Hablaron y hablaron sobre los litros hasta que lo dejaron todo claro, yo no me metí porque no tenia ni idea no quería quedar mal.
-Chicas he tenido una idea, supongo que ninguna sabrá que ponerse en fiestas asique ¿porque no nos vamos uno de estos días de compras?-propone Lierni con todo el entusiasmo del mundo.
-No se si me dejaran...- digo preocupada con tanto plan.
-Tu no te preocupes ya encontraremos la forma de que vengas.